La filosofía de Lúbora se basa en la cocina tradicional con aires de cocina moderna y de fusión. Sí, al igual que otros restaurantes de Madrid. Pero hay algunos que lo intentan y se quedan en el camino. Lúbora no.
Con poco más de un mes de rodaje ya ha marcado su territorio en la capital. Un local acogedor y elegante, con una gran bodega de vinos (de ahí su amplia y variada carta) y una cocina con productos de mercado elaborados con un gran criterio de la mano del chef y creador de Lúbora, Raúl Harillo.
El propio Raúl, muy amable y servicial desde que entras al local, nos guió a la hora de elegir los platos. Pedimos todo para compartir y esto fue lo que comimos (y gozamos):
– Ensaladilla rusa con ventresca y mojama de atún
– Coca de sardina en semisalazón casera, con micropisto y aceituna
– Orejitas de cochinillo confitadas y crujientes con chimichurri
– Ceviche de gambón con sisho sobre pan crujiente de gambas
– Steak tartar a las tres mostazas en tostas de maíz
– Tartar de atún rojo de almadraba, tobiko y kimchinesa
– Raya asada al azafrán y fideos de arroz al pesto de rúcula
– Costilla de ternera a baja temperatura al oloroso
Todo ello regado con un vino D.O. Madrid espectacular, 30.000 Maravedíes. Y de postre probamos dos sugerencias que redondearon la comida: la leche de galletas y la cañita de cerveza negra dulce. ¡Espectaculares!
Cuándo: martes a jueves de 13:00 a 23:30; viernes y sábados de 13:00 a 01:00
Dónde: General Moscardó 39 (metro Santiago Bernabéu)
Precio: 30-40 euros aproximadamente