En una ciudad en constante movimiento como Madrid, hay restaurantes que consiguen mantenerse en el tiempo sin perder su esencia. Nuevo Gerardo es uno de ellos. Con una historia consolidada en la capital, ha sabido renovarse sin renunciar a lo que lo hace especial: producto de calidad, cocina marinera con alma y un ambiente que combina elegancia y cercanía. Su nueva imagen, más moderna y luminosa, solo refuerza lo que muchos ya sabían: aquí se come bien, se está a gusto y siempre se quiere volver.
Un restaurante de toda la vida que se siente nuevo
En el corazón de Chamartín, Nuevo Gerardo ha sabido reinventarse sin perder su esencia. Con más de 20 años de historia a sus espaldas, este restaurante madrileño vuelve con fuerza: una estética más luminosa y actual, una carta afinada y una energía que combina la tradición con la modernidad.
Su ubicación, en la Avenida de Alberto Alcocer, sigue siendo un punto de referencia para quienes buscan una comida marinera de calidad en un entorno cómodo, elegante y versátil.
Marisco fresco y arroces que conquistan
La especialidad de la casa sigue intacta: el producto es el protagonista. En su gran barra de exposición, los mariscos se muestran sobre hielo como si se tratara de una lonja de lujo.
Las gambas, cigalas, navajas y almejas comparten protagonismo con una sección de arroces que ha enamorado a crítica y clientes. El arroz con bogavante y el señoret son algunos de los más aclamados, cocinados con punto perfecto y sabor profundo.
Completan la propuesta pescados frescos a la brasa, jamón ibérico cortado al momento y postres clásicos con un giro personal.



Espacios para celebrar y disfrutar
Nuevo Gerardo no es solo un sitio para comer bien. Es también un lugar pensado para el disfrute. Su renovación arquitectónica ha abierto el espacio a la luz natural, con materiales nobles, tonos cálidos y un diseño acogedor.
Cuenta con diferentes salones, perfectos tanto para comidas íntimas como para encuentros de empresa, celebraciones familiares o cenas con amigos. A pesar de su aire refinado, mantiene un ambiente cercano y un servicio profesional que no pierde la sonrisa.

Tradición que mira al futuro
La clave de Nuevo Gerardo es esa mezcla de lo de siempre con lo de ahora. Un sitio donde puedes volver una y otra vez sabiendo que te van a cuidar y que el producto será excelente.
Ideal tanto para un almuerzo especial entre semana como para una celebración de fin de semana, es uno de esos restaurantes que consiguen que cada visita sea memorable.
Su nueva etapa lo confirma: sigue siendo uno de los templos del marisco en Madrid, ahora con más estilo que nunca.

